Un hombre de Sri Lanka trabajando en Pakistan, Priyantha Kumara, fue linchado por una turba el 3 de diciembre, 2021, debido a acusaciones de blasfemia. Estos tragicos asesinatos en Pakistan por acusaciones de blasfemia no se tratan solo de vigilantismo extrajudicial.
Junaid Hafeez, profesor universitario de Pakistan, llevaba seis anos encarcelado cuando fue condenado a muerte en diciembre de 2019. La acusacion: blasfemia, concretamente insultar al profeta Mahoma en Facebook.
Pakistan tiene las segundas leyes de blasfemia mas estrictas del mundo despues de Iran, según la Comision de Libertad Religiosa Internacional de Estados Unidos.
Hafeez, cuya sentencia de muerte esta en proceso de apelacion, es uno de los cerca de 1.500 pakistanies acusados en las últimas tres decadas de blasfemia, o discurso sacrilego. No se han producido ejecuciones.
Pero desde 1990, 70 personas han sido asesinadas por turbas y fanaticos que les acusaban de insultar al Islam. Tambien han sido asesinadas varias personas que defienden a los acusados, como uno de los abogados de Hafeez y dos politicos de alto nivel que se opusieron públicamente a la condena a muerte de Asia Bibi, una mujer cristiana condenada por insultar verbalmente al profeta Mahoma. Aunque Bibi fue absuelta en 2019, tuvo que huir de Pakistan.
Blasfemia y apostasia
De los 71 paises que penalizan la blasfemia, 32 son de mayoria musulmana. El castigo y la aplicacion de estas leyes varia.
La blasfemia se castiga con la muerte en Iran, Pakistan, Afganistan, Brunei, Mauritania y Arabia Saudi. Entre los paises de mayoria no musulmana, las leyes de blasfemia mas duras se encuentran en Italia, donde la pena maxima es de tres anos de prision.
La mitad de los 49 paises de mayoria musulmana del mundo tienen leyes adicionales que prohiben la apostasia, lo que significa que las personas pueden ser castigadas por abandonar el Islam. Todos los paises con leyes de apostasia son de mayoria musulmana, excepto India. La apostasia suele ir acompanada de la acusacion por blasfemia.
Esta clase de leyes religiosas es bastante popular en algunos paises musulmanes. Según una encuesta de Pew de 2013, alrededor del 75% de los encuestados en el sudeste asiatico, Oriente Medio y norte de Africa y el sur de Asia estan a favor de convertir la sharia, o ley islamica, en la ley oficial del pais.
Entre quienes apoyan la sharia, alrededor del 25% en el sudeste asiatico, el 50% en Oriente Medio y norte de Africa, y el 75% en el sur de Asia dicen que apoyan «ejecutar a los que abandonan el Islam», es decir, apoyan las leyes que castigan la apostasia con la muerte.
Los ulemas y el Estado
Mi libro de 2019 «Islam, autoritarismo y subdesarrollo» rastrea la raiz de las leyes de blasfemia y apostasia en el mundo musulman hasta llegar en el pasado a una alianza historica entre los eruditos islamicos y el gobierno.
A partir del ano 1050, ciertos eruditos sunies del derecho y la teologia, llamados «ulema», comenzaron a trabajar estrechamente con los gobernantes politicos para contrarrestar lo que consideraban la influencia sacrilega de los filosofos musulmanes en la sociedad.
Los filosofos musulmanes llevaban tres siglos haciendo importantes contribuciones a las matematicas, la fisica y la medicina. Desarrollaron el sistema numerico arabe que hoy se utiliza en el Occidente e inventaron un precursor de la camara fotografica moderna.
Los ulemas conservadores sentian que estos filosofos estaban indebidamente influenciados por la filosofia griega y el Islam chiita en contra de las creencias sunies. El mas destacado en la consolidacion de la ortodoxia suni fue el brillante y respetado erudito islamico Gazali, que murio en el ano 1111.
En numerosos libros que todavia se leen mucho hoy, Gazali declaro apostatas a dos destacados filosofos musulmanes fallecidos hacia tiempo, Farabi y Avicena, por sus opiniones poco ortodoxas sobre el poder de Dios y la naturaleza de la resurreccion. Sus seguidores, escribio Gazali, podian ser castigados con la muerte.
Como afirman los historiadores modernos Omid Safi y Frank Griffel, la declaracion de Gazali sirvio de justificacion a los sultanes musulmanes del siglo XII en adelante, que deseaban perseguir - e incluso ejecutar -- a los pensadores considerados como una amenaza para los gobiernos religiosos de tinte conservador.
Esta «alianza ulema-Estado», como yo la llamo, comenzo a mediados del siglo XI en Asia Central, Iran e Irak, y un siglo despues se extendio a Siria, Egipto y el norte de Africa. En estos regimenes, cuestionar la ortodoxia religiosa y la autoridad politica no era simplemente disentir, sino apostatar.
Una direccion equivocada
Algunas partes de Europa Occidental fueron gobernadas por una alianza similar entre la Iglesia Catolica y los monarcas. Estos gobiernos tambien atacaron el libre pensamiento. Durante la Inquisicion espanola, entre los siglos XVI y XVIII, miles de personas fueron torturadas y asesinadas por apostasia.
Las leyes sobre la blasfemia tambien estaban en vigor, aunque se utilizaban con poca frecuencia, en varios paises europeos hasta hace poco. Dinamarca, Irlanda y Malta han derogado recientemente estas leyes, pero siguen existiendo en muchas partes del mundo musulman.
En Pakistan, el dictador militar Zia ul Haq, que goberno el pais de 1978 a 1988, es responsable de sus duras leyes sobre la blasfemia. Aliado de los ulemas, Zia actualizo las leyes sobre la blasfemia - redactadas por los colonizadores britanicos para evitar conflictos interreligiosos - para defender especificamente el Islam suni y aumento la pena maxima hasta la muerte.
Desde la decada de 1920 hasta Zia, estas leyes solo se habian aplicado una decena de veces, pero desde entonces se han convertido en una poderosa herramienta para aplastar la disidencia.
Otros paises musulmanes han sufrido un proceso similar en las últimas cuatro decadas, entre ellos Iran y Egipto.
Voces disidentes en el Islam
Los ulemas conservadores basan sus argumentos a favor de las leyes de blasfemia y apostasia en unos pocos dichos del Profeta Mahoma, conocidos como hadices, principalmente: «A quien cambie de religion, matadlo».
Pero muchos eruditos islamicos e intelectuales musulmanes rechazan esta opinion por considerarla demasiado radical. Argumentan que el profeta Mahoma nunca ejecuto a nadie por apostasia, ni animo a sus seguidores a hacerlo.
La criminalizacion del sacrilegio tampoco se basa en el principal texto sagrado del Islam, el Coran. Este contiene mas de 100 versos que promueven la paz, la libertad de conciencia y la tolerancia religiosa.
En el capitulo 2, versiculo 256, el Coran afirma: «No hay coaccion en la religion». En el capitulo 4, versiculo 140, se insta a los musulmanes a simplemente abandonar las conversaciones blasfemas: «Cuando oigais que se rechazan los versiculos de Dios y se burlan de ellos, no os senteis con ellos».
Sin embargo, al utilizar sus conexiones politicas y su autoridad historica para interpretar el Islam, los ulemas conservadores han marginado a las voces mas moderadas.
Reaccion a la islamofobia mundial
Los debates sobre las leyes de blasfemia y apostasia entre los musulmanes estan influidos por los asuntos internacionales.
En todo el mundo, las minorias musulmanas - como los palestinos, los chechenos de Rusia, los cachemires de la India, los rohinya de Myanmar y los uigures de China - han sufrido graves persecuciones. Ninguna otra religion es objeto de una persecucion tan amplia en tantos paises diferentes.
Junto a la persecucion se encuentran algunas politicas occidentales que discriminan a los musulmanes, como las leyes que prohiben el uso del velo en las escuelas y la prohibicion de Estados Unidos a los viajeros procedentes de varios paises de mayoria musulmana.
Estas leyes y politicas islamofobas pueden dar la impresion de que los musulmanes estan siendo asediados y proporcionar la excusa de que castigar el sacrilegio es una defensa de la fe.
Por el contrario, me parece que estas duras normas religiosas pueden contribuir a los estereotipos antimusulmanes. Algunos de mis parientes turcos incluso desaniman mi trabajo sobre este tema, temiendo que alimente la islamofobia.
Pero mi investigacion demuestra que criminalizar la blasfemia y la apostasia es un asunto mas politico que religioso. El Coran no exige castigar el sacrilegio: la politica autoritaria si.
Este articulo fue traducido por David Melendez Tormen por Pressenza.
Author: Ahmet T. Kuru - Porteous Professor of Political Science, San Diego State University